Las trampas pegajosas han sido utilizadas por agricultores y exploradores de plagas durante muchos años para detectar la presencia de plagas de insectos agrícolas y monitorear la dinámica de la población de dichas plagas tanto en el campo como en los invernaderos.

Davik ha desarrollado un adhesivo seco único, de larga duración, que captura las plagas de insectos voladores. Este adhesivo se aplica a láminas de rodillos de distintos colores que se cuelgan en situaciones de cultivo interior: invernaderos de cultivos protegidos, invernaderos tipo parral a prueba de insectos, estructuras verticales para el cultivo de hojas verdes en interiores, operaciones de cultivo de cannabis en interiores, etc. La condición clave es que las poblaciones de insectos plaga externos no puedan acceder directamente a los cultivos que crecen en el interior.